viernes, 27 de junio de 2014

La traición de Jessi James. Por Luis Thonis.

"Nada es tan misterioso como un alma simple"
                                                                           Henry Bremond

                        
Hoy Jessi James volvió a fallarme.
Así llamo a la chica que viene a limpiarme el depto. Supongo que habrá sido por la lluvia, raro porque no es de arredrarse. O por los chicos que cuida de los propios familiares que están en su misma casa. Tiene veintiún años, una energía desbordante: en dos horas hace lo que otra haría en seis. Vino en reemplazo de su madre que tuvo que operarse y se quedó ella. La pieza de Beethoven, estaba mucho más desordenada que mi depto, le digo, tratando de consolarla ante un caótico panorama a causa de los libros:¿Quién es Beethoven?, me pregunta interesada ¿A vos qué música te interesa?, retruco. La cumbia. ¿La cumbia villera? Sí, yo me acostumbré con eso.
Jessi vive en una casa grande en Lomas de Zamora donde coexisten varias familias. Socialmente pertenece a una clase pobre baja pero su cultura es villera. ¿Existen los llamados valores villeros? Cuando los traté gracias al fútbol supe que si se juega bien te convierten en uno de los suyos, pueden darte hasta la mujer pero llegado un momento se ponen muy pesados. 
Los valores villeros existen pero no son los que sueñan, suponen o declaman los poetas estatales o sus compradres en el curro. Jessi no lee libros, es cierto, pero eso lo compensa bien al no ver tele ni comprar los buzones que se venden al por mayor con una espontaneidad que es un salto cuántico ante los que giran y giran en calesita. No le sorprendí un solo clisé. Es una de esas chicas que con su sola presencia invitan a volar y de cada cosa tienen una perspectiva singular. No esoy proponiendo una cultura de cumbia más fútbol, sólo me limito a escucharla. Sé que el ideal dominante es hacer de esta gente una masa de analfabetos corderos y si es posible extenderlo a toda la población. Pero ser analfabeto no es contrario a no tener inteligencia. Asombra la seguridad que tiene apenas pasados los veinte con su cara de angelita. Parece que de pronto tuviera cientos de años. Hay en ella una fuerza propia de las mujeres bíblicas que la arranca del contexto y la clase en que vive. 
El dueño de la casa era el abuelo pero está fugado porque la poli lo busca por violador y ella fue una de sus víctimas.
El mundo de Jessi se parece al de un cuento de hadas, me refiero a la violencia que contiene bajo una apariencia de calma y una bondad que se le atribuye a las capas populares mediante discursos edificantes que los transforman en seres irreales. 
Por momentos parece un culebrón pero el tema del amor es complicado y el abuso y la violencia recurren en sus historias como los principales protagonistas. A medida que los narra desborda los géneros y los va transformando en una novela actualizada del siglo XIX. Los personajes son innumerables y cuando una historia parece cerrada siempre aparece otro, impensable como su tía evangelista de Río Negro.
--Mi vida es la mitad linda y la mitad fea- me asegura.
- ¿Qué cuentos de hadas o dibujos animados te gustaban de chica?
-No sé, yo no tuve infancia. No la pasé bien.
Jessi lo dice sin un matiz de tristeza como si fuera la cosa más normal del mundo.
Para Jessi el mundo se divide en dos clases: los que hinchan las pelotas y los que no y la tía evangelista ocupa el primer puesto.
Le pregunté a qué clase pertenecía yo, si era un hincha pelotas más. No, aquí me divierto mucho, me contestó. Supongo que es porque a veces cuando trabaja le cuento historias que la tienen como protagonista para escucharla estallar en una risa que me libera de algo que desconozco.Las aventuras de una Jessi James que nunca imaginó pero que no le es del todo ajena.
A ella le gustan las chicas, lástima que sean tan cargosas, acota. La llaman a veces por celular y les dice que está ocupada.
No acostumbro meterme con la orientación sexual de nadie, pero le pregunto: ¿Y los muchachos? No sirven ni para jugar al fútbol, dice, lapidaria: juega con los varones de wing izquierdo porque con las mujeres se aburre.
Jessi desborda, tira el centro, entro con un pique corto que sólo tienen los goleadores, toco suave y gol, relato, agradeciéndole con el gesto tradicional del que anota al que le hizo el pase. Sonríe cuando le muestro una número cinco que me llevé de recuerdo en un partido donde hice un gol definitorio. Tiene actitudes masculinas, pero detrás de ella hay una linda muchacha, con una cara de traviesa carasucia que desarma a cualquiera. No tiene un solo matiz de hipocrecía y eso se nota cuando habla de sexo. Para ella no es algo "sucio" que haya que esconder y no se opone a su forma de ser. Un personaje popular, sencillo, si no hace no existe, decía Pasolini y todo lo que ella hace está exento de esa vulgaridad que va de la mano de la sobreactuación. 
Probablemente la ausencia del padre, el hijo de perra del abuelo y el hijo de éste tuvieron que ver con esa hostilidad que tiene con los hombres aunque se va a jugar con los varones.
El primer mes fue de trabajo con algunas faltazos que me irritaron pero cuando Jessi me tuvo confianza me contó sobre todo lo que le preguntaba, por ejemplo, por el padre que ni registró: silencio y ausencia total, ni visto ni conocido. 
¿Y vos sos celosa?- indago.
- Si, de mi madre y de mi hermano de dieciocho soy muy celosa. Mi madre se va mucho tiempo con mi hermanastra, que es la hija del marido actual de mi vieja. No me gusta la actitud de esa pendeja. Me busca con la mirada. Cuando me doy vuelta me sigue con su mirada, eso lo detesto.
--Decime más de tu hermanastra. ¿Qué es eso de que te busquen con la mirada?- las frases de Jessi son intrigantes y contienen relatos.
--Tuvo un hijo a los dieciséis años, ahora tiene dieciocho y no trabaja. Cuando una tiene un hijo tiene que buscar como mantenerlo. Ella todo el día está llamando a mi madre, viene a comer a mi casa. A mi hermano tampoco le gusta lo que hace. A mí no me importa que venga a comer pero me mira mal. ¿Qué está buscando?
 
-Quiere quedarse con tu madre, meto púa. ¿Y por qué sos celosa de tu hermano?
--No quiero que ninguna estúpida le haga daño- me dice una Jessi contundente y asaltada por un instinto maternal.
--Vos la querés mucho a tu madre…
--Me peleo mucho, pero con ella pasamos momentos muy difíciles en los tribunales El padre de ella abusó de Evelin y quiso hacerlo conmigo.
--El padre de ella es tu abuelo
-- Si, me abuelo de sangre. Me olvido que era mi abuelo. Evelin tenía cinco años cuando comenzó a abusarla. La penetró a los cinco. Conmigo quiso hacerlo, pero me cuidaba mucho mi abuela, y después la siguió cuando era más grande. Pero nunca pudo agarrarme para hacer eso porque lo arañaba y corría.
Ahora su hermana Evelin tiene once años y me entero cómo su abuelo le jodió la vida. Me cuenta que Evelin tiene miedo a que le hagan algo de nuevo, que llora cuando la abrazan incluso chicas amigas de su edad, está con el psicólogo en tratamiento. Yo también fui pero dejé de ir porque te hace muchas preguntas tontas. Si yo quiero estar con veinte mujeres voy a estar con veinte mujeres, si quiero estar con un solo hombre voy a estar con un solo hombre. No me gustan que me estén controlando, hace dos días rompí con la chica que estaba porque no tengo paciencia. Me decía no fumes, no tomes, no hagas esto ni lo otro. Tiene diecisiete años y me dice cosas que ni mi vieja se atreve. Todavía soy joven y tengo toda la vida para encontrar a una mujer que va a amarme de veras- concluye.
Como vive en  Lomas de Zamora le cuento historias: Insaurralde la ve pasar y se enamora de ella, deja a la modelo, a la otra Jessi plastificada y ella para matar dos pájaros de un tiro lo corresponde y lo aviva, da un salto en su carrera política al perder su cara de títere sonriente. Les dice a los otros pretendientes: cállate Scioli, sos un sepulturero, enterraste a todos con los que estuviste, ahora te toca hacerlo con vos, Coqui, dejá de decir pavadas que te vamos a encerrar en una gran alcancía para que te alimentes de avaricia y promete un gobierno que no le hinche las pelotas a la gente. Sin propagandas, basta de culto a la personalidad, eso prueba que nadie la tiene. Mi única propaganda es ella, dice un inspirado Martin y aparece Jessi como primera dama enamorando al pueblo que cree reconocer en ella un pichón de Evita. Eso es lo que necesitábamos dicen en coro intendentes y gobernadores. Pero el día del casamiento, atención, Jessi cambia de idea, se lleva dos pistolas y termina de una vez con todos los asesores y punteros de punteros que ya le tienen  hinchada. Jessi lo hizo: comienzo canyenge del fin del PJ.
Otra: ella y yo asaltamos un banco, le pido que por favor no mate a nadie, la cosa sale bien, nos vamos con el botín pero Jessi se arrepiente, vuelve al banco para comenzar a los tiros, intento detenerla, por qué haces eso si ya tenemos la plata, le digo: está en mi naturaleza, me responde, había muchos hincha pelotas.
A estas historias Jessi las festeja a risotadas. Su risa es una burbuja que aflora de súbito, asciende y explota en el aire como un disparo. No he podido todavía lograr que me haga caso, que me avise cuando no viene, pretexta que a veces no puede ni quiere dejar solos a los chicos no por los ladrones sino por los familiares próximos. Vive en estado de alerta en una casa grande y está rodeada de tantas tías, primas, hijos de hermanos que me confundo en las genealogías. Y siempre aparece alguien más.
La confusión viene de que la madre tiene tres hermanos y tres hermanas y el abuelo tuvo tres hijos y todos frecuentan la casa. Ella cuida a tres hijos del hermano más chico de la madre y a ellos se suman otros cinco más que son los hijos de la madre, tres de un solo padre y otros dos de un padre desconocido.
-¿Y vos los cuidás a todos? Qué vida agitada tuvo  tu mamá.
-Sí, espero que no me salga con otro martes trece. Porque a veces aparecen hijos de no sé dónde.
- ¿Cuidás a ocho chicos?
- No, los que dan trabajo son los tres del hermano de mi vieja. El bebé tiene cuatro meses, la nena, Candela, tres años y el otro siete. Mi hermano mayor tiene dieciocho, se cuida solo y a veces ayuda.
Me dice que no se lleva con sus primas. Ni bien ni mal, no se lleva. El motivo es que a ellas, les gusta la joda, aclara. Me quedo atónito cuando me dice que una de ellas, Anabella, la hija de uno de los hermanos de la madre, tuvo un hijo a los once años sin padre reconocible y sigue de joda. Ella cuenta todo como si se tratara de la cosa más natural del mundo. La joda es irse de baile. Jessi también va pero “así nomás” en pantalones en cambio Anabella se muestra lo más sexy y provocativa que puede.
Y siempre recurre el tema del abuso: el hijo del abuelo- me dice- intentó hacer lo mismo con ella y esta vez reaccionó amenazándolo con un cuchillo. Se lo fue a decir al otro de los hijos que es policía y no le creyó. Y para colmo su mujer vino a acusarla de provocar a su marido. 

Le tengo afecto a Jessi y me tiene atrapado: ni bien la veo comienzo a urdir historias, me inspira. Cuando se despide me estampa un besote infantil, de nena que me transforma en padre momentáneamente. Golpes bajos, no, Jessie. Muchas historias que inventé tomaron forma en la realidad, le advierto.

A partir de ese momento, Jessi cumplió puntualmente los horarios. Me fui enterando de más detalles de su vida. Era lo contrario a la salteadora de bancos que protagonizaba las aventuras que le inventaba sino una chica muy sacrificada por su familia. Jessi tenía algo que ver con las mujeres que había amado: eran de clase muy alta o muy baja, nunca de clase media. Se podía no ser culta y no ser vulgar. Estas mujeres poco tenían que ver con mujeres que frecuentaba como amigas. Una de ellas no sabía un comino de fútbol, le desagradaba, pero cuando venían los mundiales se ponía la camiseta blanca y celeste y se fanatizaba. No sabía ni de fútbol ni que la selección no tenía nada que ver con la patria o el himno, era una asociación mafiosa que vendía patrioter. La selección nacional me parecía un ejemplo evidente del amor apiñando y apilado que iba más allá del deporta hasta convertirse en religión de estado. Y de qué estado. Le pregunté con un lenguaje adecuado qué pensaba de esto a Jessi.
--No, la selección no me interesa, viven pasándose la pelotita y cuidándose las piernas. Yo soy de River, amo a mi club, los jugadores pueden ser malos pero no son figuritas como ese narigón.
Así habla Jessi. Nada que ver con el lenguaje de los paraguayitos que le con un toque desprecio les atribuyen los poetas estatales. Se quejaba de que su madre, sus hermanos y primas le hincharan las pelotas pero atendía sola la casa, incluso cuidaba a su abuela pese a la hostilidad que tenía en sus tratos con los viejos. 
Nunca me pidió que le aumentara un peso. Fui añadiéndole cada dos semanas sumas con un ojo en la inflación para que se comprara lo que quisiera y apareció con un buzo nuevo. Le propuse darle lo que quisiera con tal de que se comprara un vestido y ante su negativa fui subiendo la oferta. 
Quería verla vestida de mujer.
-Ni por todo el oro del mundo- respondió incorruptible.
Entre las historias que le contaba por ráfagas mientras tenía tiempo comencé a privilegiar la del romance con un chico de su edad: ella se enamoraba de su ser, no porque fuera hombre, se le entregaba y descubría que el amor no tenía que ver sólo con el sexo sino con algo que no podía definir y que le era desconocido.
-El amor es eso Jessi- rematé.
-Con pendejos no quiero nada. Son insoportables- contestó.
Pasaron varias semanas y de pronto la veo a Jessi con pancita. ¿Qué pasó, Jessi?, estás engordando
-No, tuve relaciones con un pibe- me contestó secamente.
Me tomé la cabeza- No me digas que estás embarazada.
-¿Y qué? Ya soy grande y puedo hacer lo que quiera. La boluda de mi tía evangelista se enteró y vino de Río Negro a darme lecciones.
-Pero si me dijiste que los hombres no te interesaban y menos los pendejos.
--Sí, pero las historias que usted me contó me gustaron mucho y quise probar.
--No, Jessi no, casi rezaba queriendo que el tiempo retrocediera, me olvidé decirle que tenía que cuidarse porque nada anunciaba una posible cama. Nunca estuve a favor del aborto, tampoco en contra, siempre pensé que debía realizarse o no según cada circunstancia específica y éste era un caso.
--¿Y no se te ocurre quitártelo?
--Ni loca, si cuido a tantos chicos voy a poder cuidar el mío.
Ahí me di cuenta que mi propósito era egoísta, no quería perder a mi asaltante de bancos.
-Al parirlo no vas a venir más, me voy a quedar solo, la mugre va a crecer y seguro que moriré de contaminación. Me volviste a traicionar y esta vez me liquidaste.
--No voy a dejarlo. Ni al bebé ni a usted. No dejo a nadie que quiero en el camino. Yo no lo traicioné, fue involuntariamente. Y fue usted el que me impulsó a eso con sus historias. La próxima vez piense lo que va a contar.
- Me querés decir que yo fui el culpable o el instigador...
--No, nada que ver, la boluda que decidió fui yo, él me invitó a su casa a tomar unos mates y no sé cómo pasó.
Otra en su lugar me hubiera culpado para luego intimidarme. Pero Jessi nunca se victimizaba ni culpabilizaba. De todas maneras, era el momento de una censura preventiva: no tenía que contarle más historias de asaltos de bancos, ninguna donde las armas fueran protagonistas.
--Bueno, por lo menos decime que estás enamorada del futuro padre.
-Para nada. Es un inútil, aparte no me gusta.
--Entonces todo fue doblemente inútil si no te gustan los hombres. ¿Hay un hombre que te guste?
--Sí, usted, por el modo en que me trata. Pero yo soy muy respetuosa cuando trabajo.
En rostro de Jessi irradiaba un toque carmesí que le daba un tono de inocencia y malicia. Un rostro de mujer estaba floreciendo aunque siempre para mí será una nena traviesa.
-Ja, ja, para vos soy muy grande y Jane Eyre ya se escribió. Vos sabés de miradas y yo nunca tuve una pertinaz para vos- elevo el lenguaje.
-La juventud no tiene nada que ver con la edad- Jessi casi repitió a Nietzsche. Usted tiene un lindo ser, pero los hombres siguen sin gustarme. Lo ideal sería que fuera mujer.
- Soy la mujer que estuviste buscando toda tu vida, pero esa mujer no existe, dije. Ahora- le puse el dedo índice sobre la nariz en señal de un severo reproche-, soy yo el que te traicionó. Involuntariamente...
La risa cantarina de Jessi no se hizo esperar.
La vida está hecha de imposibles, Jessi. Ahora si vas a ser madre tenés que dejar de asaltar bancos.
-Va a ser difícil- me siguió el juego- pero lo intentaré.
Jessi no cree en Dios ni en los santos pero en ella hay algo divino.

jueves, 26 de junio de 2014

Hegémono. Por Santiago Armando.






Cuando empecé el primario en marzo del 82 me acuerdo de escuchar a mamá emocionada hablar de los del pool del San Juan El Precursor; Jorge Velasco, amigo al día de hoy, que vivía a la vuelta de lo de mi abuela( Laprida y General Paz)y pude volver a ver recién hace unos meses después de veinte años;el áspero Santiago Burgauer en la esquina diagonal a la casa donde nos mudamos después; un morochito muy futbolero en la otra cuadra de la misma edad de Burgauer, que duró un año y se mudó y cambió de colegio; Gonzalo Armas, que vivía sobre Misiones más para La Calabria; los hermanos GonzálezMendivelsua, Javier, Santiago y Martín; los Pérez Corral; los García; y Mateo Malenchini… Los Malenchini vivían casi en la esquina de Chubut e Intendente Becco. Toda la primaria nos llevó Peter, su padre, al colegio.Peter Malenchini, el violador de niños:sonrisa verbo y mirada de fuego,me acuerdo que fumaba Camel; difícil imaginarlo bombear su pija en la boca abierta de cualquier chico del San Juan como yo, como decenas de ex alumnos testifican, en los campamentos educativos que fundó y siguieron haciéndose por años no se si hasta hoy.

Hace unos años me la crucé a María, su ex mujer y nuestra catequista, a quien recuerdo con mucho cariño, tanto como a las otras dos catequistas, Mariana e Isabel. Yo me estudiaba todas las lecturas del nuevo testamento y todos los miércoles en ese aula- que después se refaccionó y pasó a ser la carpintería de Palotto-esperaba a Mariana, que nos decía que el amor de Cristo era algo HERMOSO, degustando sonoramente esa palabra, tan denostada en nuestro por grasa; todavía la veo decirla abriendo su boca de concha, mostrando su dentadura escultural e interiores bucales inflamados de color salmón.

María me dijo que había dejado a Peter en el año noventa,me lo dijo con repulsión, empezando a caminar para dejarme atrás.

 Mateo; Rafael Martinez Casás y yo corríamos en bicicrós en una pista que había sobre Fondo de la Legua, detrás del Jockey, donde ahora hay un Carrefour. Ahí entrenábamos para competir los sábados en un predio en San Martín. Mateo Malenchini pedaleaba parado, lánguidamente, ajeno a la competencia en medio de ella. Rafa era un diablo, solo perdía contra el mejor de la provincia que después hizo carrera. Peter nos llevaba en una Mercedes roja de fines de los setenta- con caja para las bicis-, se quedaba toda la tarde mirando todas las carreras,y a la vuelta nos dejaba a cada uno en su casa.

Tuvo durante muchos años un taller de pintura junto a las vías que pasan sobre el túnel de Primera Junta, sobre este taller quiero ampliar.

Una amiga que allí asistía de niña me contó que nuestro artista, en casaca, chupa, calzón y peluca, levantando los pliegues de las flujos aéreos de la tarde extraía la espumadela marejada que pegaba en el casco de un velero llegando al puerto de Punta del Este, que pintandolo frenéticamente; que con profusión de toques aplicaba la cálida noche de ensueño a la rompientebajo profusión de noctilucas; que engranaba entre sus yemas de Sai Baba el barro plomizo para la papada de un quelonio; o trasponía las centenarias palmeras de la barranca de la plaza siguiendo los trayectos de los fuegos artificiales del hipódromo.

 Estas proezas solo eran posibles después de calentarse esbozando desnudos desus alumnos favoritos sobre una banqueta de teca que acomodaba según el sol detrás le entrara de lleno. En el patio había un güembé que fue cortando desde el tallo para pintar escenaspalaciegas de su reino subtropical:niñas sirvientas abanicaban a los yacientes discípulos predilectos.Los más pudorosos, generalmente alumnos debutantes, vestían bolsas de arpillera. Los más avanzados se batían espiando de soslayo la frenética actividad del maestro tras la cuadratura del bastidor.

 El taller duró los años que duró por los inagotables recursos de improvisación enjuegos de encanto, pero solo Peterpintaba, y cuando los padres inquirían sobre las obras de sus hijos, se les mostraban cientos de acuarelas olvidadas en un placar, con plena complicidad de los niños.

La experiencia imborrable de concurrir al taller fue tan fuerte que luego del escándalo y el exilio del maestro, los ex alumnos siguieron pintando a escondidas retratos paternos y paisajes de la costa marítima uruguaya, este último el motivo favorito de Hegémono. Así se hacía llamar.

Tuve la dicha de ir a uno de sus campamentos educativos, no porque como todos esperara que se fijara en mí, ya que nunca me llevó ni el menor apunte, tal vez porque yo pasaba siempre del júbilo al llanto y nunca fui reservado. Hegémono me evitaba aun siendo yo el niño más bello. Eso lo recuerdo, yo aparecía y él corría la cara.

Estábamos en Mar Azul,  ahora un caserío cercano a Villa Gesell que en ese entonces solo era un monte bastante espeso junto a la playa, donde solo había una caseta de guardavidas y un bar. También había unas ruinas de canchas de paddle aferradas por la vegetación. De noche jugábamos a la escondida y también a la caza del zorro, un misterioso personaje que todos teníamos que descubrir, que se robaba la comida y la ropa con la venia de los organizadores. Una noche de éstas salí con dos amigos a ver si lo encontrábamos, habíamos robado unos cigarrillos al director y daríamos una vuelta al bosque para fumarlos y tratar de encontrar al sátiro para cobrar la recompensa de pan con salamín por el resto de las comidas que quedaban. El bosquecito, con desniveles y olor fuerte de eucalipto con arena rancia, no era muy compacto, y la luna penetraba todo llena de misterio. Pero apenas cuando nos adentramos hasta las canchas escuchamos un ruido de fuerza ahogada y nos quedamos quietos, retrocediendo mudos detrás de unos árboles; esos ruidos siempre los imitábamos cuando en broma uno se montaba sobre otro para reproducir los coitos de los mayores, también escuchábamos el ruido de una hebilla de cinturón moviéndose en el piso, y jadeosde lentos y hondos clavados con alivios y resoplos. La luz de la luna se cortaba en el paredón de la cancha y no podíamos divisar las siluetas. Solo cuando los protagonistas terminaron aquel asunto y volvían a las carpas la luz desnudó la figura de Hegémono que apoyaba la mano en el hombro izquierdo del recién poseído, que no era otro que el paternal vicedirector, que yo tanto admiraba y quería.


miércoles, 18 de junio de 2014

La nov lengua dihimmi. Por Luis Thonis




Hace poco dije que el viaje del Papa tenia más que ver con el Espectáculo que con Dios o la paz. Y que era diferente que rezar juntos no era lo mismo que juntarse para rezar en referencia a él, Peres y Abbas. La respuesta de Hamas no se hizo esperar: en un raid tomó tres rehenes en Judea-Samaria. Ahora opera en los territorios de la Autoridad palestina luego de hacer la paz con ella, lo que significa que se la ha metido en el bolsillo. La prensa presenta a la Autoridad palestina como “moderada” pero en el sitio de Al Fathah los tres rehenes son representados como ratas marcadas con la estrella de David.

Para referirse a Israel hace el tiempo que el mundo emplea un lenguaje dhimmi, un equivalente internacional de la nacional lengua mongo. Esta lengua se expande, la cultivan las crédulas universidades cuyos ideólogos predican la Gran dimisión, lo que supone un occidente convertido en un montón de ratas asustadas que conjuran la estrella de David y donde la Argentina es la vergonzante vanguardia habida cuenta de su política canallesca y grotesca con Irán: los propios acusados del atentado a la AMIA van a investigarse a sí mismos siguiendo las pautas de un estado de derecho pese a que su cultura les permite practicar la taqiyya, el doble lenguaje para engañar a los infieles según al público que vaya dirigido si es por la grandeza de Alá. De ahí que cuando hablen parezcan los seres más nobles y pacíficos del mundo pero como lo muestran video cuando sus representantes se encontraron con D´Elia gritaron en coro ¡muerte a Israel!.
Hace tiempo tambien dije que los genocidios del futuro serán programados por las universidades: el montaje en función de una segunda Shoá es evidente y hasta diría reclamado a gritos, esta vez en nombre de los derechos humanos. De ahí el éxito de los zombi pensadores como Alain Badiou que plantean sin reservas que el nombre judío es en sí mismo “nazi” y que Hitler fue el mejor intérprete luego de Nabucodonosor del problema judío, ignorando, a diferencia de Borges, que enunciarlo es ya pedir una solución final. Giles Deleuze, definitivamente descerebrado luego de su encuentro con Guattari, en Los indios de palestina- Libération, 1982- demuestra haber visto muchas películas de cobwoys y de indios: a eso reduce el conflicto palestino-israelí, otros de los productos de su esquizonanálisis donde la deriva culmina en un zombi terminal que no sabe ni quién fue Arafat. Israel continúa “ el sueño americano”, invade los territorios árabes y va por el indio Comanche siguiendo la conquista el Oeste a la que reduce las guerras de 1948, 1967 y 1973, pasando por alto los ataques arteros de los estados árabes armados por la Unión Soviética que por supuesto no existe como en todos los negacionistas. Considera "orgullosa" la fórmula de Israel- “nosotros no somos un pueblo como los otros”-  como propia de un pueblo de élite y no en referencia a la idolatría como lo hace Martin Buber, al que evidentemente no conoce como nietzchiano de salón aunque D´Elia podría suscribir lo que dice punto por punto. 
Más grave, mucho más grave es la respuesta que supone que el pueblo palestino- de suponer que exista- le da a Israel: Nosotros somos un pueblo como los otros, nosotros no queremos ser sino eso"- ¿Qué pueblo es como los otros? ¿Por qué es dramático ser diferente si no se está a favor de aniquilar la diferencia? ¿Habrá escuchado este esquizo provinciano hablar alguna vez de cosmopolitismo y que Israel practica ya que conviven cristianos y árabes o quienquiera hacerlo gozando de los mismos derechos? ¿Hamas y la Jihad islámica son cosmopolitas y le dan voz a judíos o a cristianos en sus desconocidas instituciones? Este mítico "nosotros" palestino carece de toda singularidad y está calcado de la revolución francesa, del universal republicano francés que supone una igualdad ontológica de los pueblos sobre el modelo de una abstracción vacía. Es algo común a la ideología francesa que como ha demostrado Eric Marty ha sido el pretexto de todas las empresas colonialistas: el "ser como los otros." Deleuze estaría así practicando un colonialismo sobre un pueblo inexistente: toda una proeza del esquizoanálisis.
Buber en su refutación de Simone Weil que lo llama " la gran bestia con un disfraz religioso" responde: "Precisamente en la religión de Israel es imposible en erigir en ídolo a todo un pueblo, pues la actitud religiosa hacia la comunidad es crítica y postulativa. Quienquiera  adjudique a la nación o la comunidad los atributos de lo absoluto y de la autosuficiencia, traiciona la religion de Israel".  Quien niega esto está condenado a volverse idólatra y hacer cuerpo con el eterno retorno de los faraones. Pocas veces se leyó algo de tal nivel de imbecilidad  como esta lectura de Deleuze a la que lleva el tener como objetivo barrer el orden simbólico considerado como fascista y reaccionario. 
Las nuevas feminazis en boga, Judith Butler o Beatriz Preciado, siguiendo a Deleuze plantean que el hombre debe “dinamitarse el sexo”, basta ya de hombre y de mujer, podemos, patalean, tener mil sexos y se llaman guerrilleras contra el patriarcado, salen a combatirlo en Nueva York y en Madrid pero no en Teherán ni en Riad donde no hay machismo y las mujeres la pasan bárbaro. A su vez, las feminazis elogian las relaciones de adultos con los niños haciendo el elogio de la pedofilia ante un fantasmal patriarcado. Es una cultura que expulsa al sujeto antes que entre en el lenguaje, haciendo del otro el objeto del propio goce. Se trata de expulsar de las relaciones el entre dos, siempre conflictivo, apelando a lo instrumental. Es la avanzada zombi de occidente contra occidente que tiene ya la adhesión de dihimmis que se ignoran como tales. Todo esto lo consumen despreocupadamente contestatarios angustiados que creen así participar de una vanguardia reclamada por el Espectáculo y son miméticos reflejos de una propaganda que ayer les hizo comer los buzones de las revoluciones norcoreana, vietnamita, cubana, y  a revolución cultural china con faraones incluídos y que ahora se aferra a la nueva idolatría del mito palestino porque el marxiquiosco tiene que seguir dando réditos hasta que haya a la vista un nuevo negocio. Los que ayer promovieron esta nueva esclavitud hoy están a la vanguardia del populacho dihimmi que la sustituye. Lo que no se le perdona al judaísmo es haber ganado la guerra de lo arcaico, contra los ídolos y la vuelta de los faraones. Es algo que Michel Foucault percibió al decir que el relato hebreo es una "constestación" a todas las babilonias.

Se trata de que Israel las pague todas, por ejemplo, que su desaparición le resuelva a Europa el problema del multiculturalismo que según la misma Angela Merkel ha fracasado y no presenta una salida visible y esto tiene que ver con el crecimiento de los nacionalismos xenófobos que complican más el panorama porque pueden sufrirlos musulmanes que no tienen nada que ver con los locos de Dios. A Obama le permite seguir su política de un mundo más seguro para las dictaduras- Rusia, China, Irán, están cada vez más fuertes- y asesinos de masa. A otros como el siniestro Atilio Borón seguir dando sus sermones de marxo chavismo abrazado a la tumba del gran bolivariano. Hay en el repliegue norteamericano un comprensible motivo: el contribuyente está cansado de financiar intervenciones militares para que su país sea insultado a voz batiente como sucedió en Irak donde decían que era “para quedarse  con el petróleo” sin saber lo que significaba el panarabismo del genocida Saddam Hussein. La prensa ni registró los argumentos de un Elie Weisel o un Vaclav Havel. Hablo de una intervención polémica pero en Bosnia o Kosovo también se condenó a la OTAN por detener el genocidio de Milosevic con bombas, el único idioma que hace detenerse a esta clase de gente. Si Estados Unidos hubiera intervenido en Siria contra el crimen de masa que está cometiendo Assad y a la vez contra los jihadistas que practican la limpieza étnica en las ciudades cristianas, o terminado de una buena vez con los carniceros del Hezbollah en el Líbano, hoy sería acusado por Borón y otros zombie intelectuales de ser el primer ogro a escala mundial. Obama se porta bien, es políticamente correcto como quieren los progresistas, pero olvida que no por eso su país sigue siendo un blanco militar de los jihadistas que han declarado la guerra “a judíos y cruzados” según la lengua medieval que utilizan.

“El primer ministro de Israel, el conservador Benjamín Netanyahu, acusó el domingo al grupo islamista palestino Hamás de haber secuestrado a tres jóvenes judíos cuando regresaban de sus clases de religión en una colonia israelí en Cisjordania, el jueves por la noche. Netanyahu habló en inglés para asegurarse la atención internacional en inglés, para asegurarse la atención internacional.”

La nota del diario El País da cuenta de la lengua dihimmi  que se utiliza para leer lo que sucede en Medio Oriente. Tiene que ver con la política de la Gran dimisión. El de la prensa argentina es todavía peor: ahí directamente se consuma un vericidio al no decir que Hamas opera ya en Judea Samaria. Se presenta la detención de palestinos en Hebrón como reacción desproporcionada y el secuestro como algo natural en una región ocupada pese a sus nombres bíblicos. Los ocupantes son los palestinos que siguen practicando el terrorismo, palabra que aparece entre comillas.

Netanyahu es calificado por el progresista El País de “conservador” como si en ese contexto hubiera que ser “revolucionario”. Se aclara que habla en inglés para ser escuchado: ¿en qué lengua va a hablar para hacerse entender, si la misma ONU  duda de que haya existido el secuestro festejado ruidosamente en Palestina como sucedía antes el muro cuando los atentados en lugares públicos dejaban víctimas civiles.. Israel tiene que estar al tanto que no puede esperar nada de los dirigentes europeos, ni de la ONU, ni de Obama o de los rezos el Papa que no se referían al mismo Dios que Abbas. El secuestro de tres jóvenes en Judea Samaria prueba que la guerra continúa y que el único modo de que termine es destruir a Hamas y sus cómplices: es lo mejor que puede hacerse por este pueblo psicotizado antes que tenga armas nucleares. Este sería un acto “revolucionario” que haría poner el grito en el cielo al populacho dihimmi. La bienpensante prensa europea llamó “colonos” a los secuestrados como si fueran invasores de una tierra donde los judíos estuvieron hace cuatro mil años aun si no vivían el la región que volvió a ser ocupada tras la guerra de los Seis Días. Si Israel la devuelve sin ser reconocido como el populacho dhimmi lo pide-algo que no sucederá por parte de los criminales dirigentes palestinos- se instalará una base militar como sucedió en Gaza, armada por Siria, Irán, sponsor oficial del terrorismo en el mundo y diversos estados árabes que financian la cultura de los cinturones con bombas. Israel no debe escuchar a los apaciguadores que por desconocer la historia, por buenas intenciones o  por mala fe, cobardía correctamente política presentan a –Hamas como un grupo que contribuye a la paz. Es la posición de Obama y la Unión europea. No debe escucharlos ni a ellos, ni  al Papa ni a Mongo Aurelio que están lejos de la línea de fuego.. El secuestro de dos jóvenes judíos y un americano en Judea- Samaria ha sido indiferente o excusado. Judea Samaria se presenta a los ojos del mundo como un territorio que debería ser judenrein- limpio de judíos- y parte de un pueblo inventado, el palestino, hace cuarenta años con el objetivo de destruir a Israel, un pueblo que es parte integrante de un país que nunca existió históricamente: Palestina. Quien quiera enterarse no tiene más que ver los carteles del Mayo 68 francés que reivindicaban las luchas del tercer mundo: están Mao, Guevara, Ho Chi Min, etc, pero no hay hubo referido a la causa palestina. Arafat lo inventó luego de la derrota de la Guerra de los Seis Días y en las declaraciones todos se autodenominaban jordanos.

La islamofobia es condenable pero hay que diferenciarla de la lucha contra el expansivo integrismo islámico. 
Como escribe Allen West, advirtiendo a los dhimmis occidentales de la Gran dimisión:

I’m sick of reading about Christians, Assyrians, Chaldeans, Copts, being slaughtered by the so called “religion of peace” — what utter bovine excrement

I’m sick of people worrying about jihadists taken off the battlefield and held at a freakin’ five-star facility like GITMO with top notch medical treatment and cable TV while Americans captured by the enemy are brutally tortured, and ritually beheaded. I’m sick of cowards who release the enemy’s leadership and try to convince the American people they are not a threat.

I’m sick of these bastards believing they can taunt and threaten our nation while we sit back and fools like John Kerry talk about climate change being a global threat — and want to ask Iran for assistance in Iraq. Iran is the number one state sponsor of terrorism and has the blood of American troops on its hands.

Yep, I’ve had it and will be relentless in defeating Islamic totalitarianism. Sir Winston Churchill tried to warn England of the threat of Naziism — of course the country initially sided with Chamberlain. And so history is repeating itself. Warning to liberal progressive socialists: stand clear lest you find yourself declared an ally with these barbarians. I am looking for brave Americans to enjoin this battle. This is not about killing them all, just killing the ones who need killing — since that is all they understand.”.


Israel lleva a cabo detenciones, ciertamente, muchas de ellas administrativas, lo que le permite al Estado mantener un detenido por tiempo indeterminado. Si bien hay sectores dentro de Israel que se oponen a esta práctica (incluyendo organizaciones de derechos humanos y juristas), estas detenciones no son poco comunes en países democráticos que luchan contra el terror y sólo aplican estos métodos a personas implicadas en actos de terrorismo, asesinato o conspiración, para perpetrar algún ataque. A los familiares se les permite ver a los presos y ellos saben perfectamente donde están. Es más, estas detenciones pueden ser apeladas a la corte israelí y llegar hasta la Suprema Corte.
Es correcto que detenciones administrativas pueden llegar a ser abusadas y no niego que esto ocurra en Israel, en ciertas ocasiones, dada la dimensión de la amenaza. Pero Israel es un Estado de derecho, donde hay un sistema legal que se aplica a los ciudadanos israelíes, pero también los residentes de los territorios pueden apelar a ellas.
Contrariamente a la opinión de Brieger, no existe el secuestro por parte del Estado israelí y menos aún el asesinato arbitrario. Israel ha asesinado terroristas y atacado centros de terror para proteger a la población o para prevenir un ataque enemigo, como los ataques suicida contra la población israelí, por ejemplo, o los misiles disparados desde Gaza contra poblaciones israelíes civiles. No existe asesinato arbitrario de gente y menos asesinato o secuestro de civiles inocentes.
También suele ocurrir que algunos palestinos mueren, pero mayormente son aquellos que intentan atacar ciudadanos u objetivos israelíes. Debo admitir que sucede también que palestinos inocentes han muerto como víctimas colaterales de la guerra contra el terrorismo. Pero aun así, si no hubiera terror no habría guerra contra el terror. Y sin guerra contra el terror, no habría tragedia colateral tampoco.
Pero bajo las circunstancias en que Israel vive, sería un milagro que estas cosas no ocurrieran. Si fuese como dicen los propagandistas que Israel comete genocidio contra los palestinos o viola derechos humanos inescrupulosamente, no hubiese quedado nada de la organización Hamas hoy en día y quizá el pánico que hubiera causado hubiera disuadido cualquier acto de terror. Pero lo que guía a Israel es la ley y la autolimitación. En Israel hay algunas transgresiones pero no existe impunidad.
Juzgar a Israel en términos morales tan rígidos e implacables es injusto. Comparar a Israel con una organización donde los abusos no son simplemente consecuencia de una férrea política de autodefensa sino una sistemática imposición de terror y muerte, es un ultraje.
Y he aquí que Brieger trae otro argumento: “La ocupación israelí, a partir de 1967, genera resistencia y la violencia sólo se puede entender en este contexto”. O sea, Brieger sostiene que el terror es fruto de la ocupación Israelí.
Después de la intifada Palestina (1987-1993), la población israelí y muchos de sus líderes comprendieron que no se podrían mantener los territorios. Una, obviamente, porque los palestinos no lo quieren. Otra, porque los israelíes no lo quieren, ya que tal conquista significaría una amenaza demográfica para la mayoría judía en Israel.
Así se inició el proceso de paz de Oslo que hasta ahora no ha encontrado salida pese a que Israel ofreció propuestas de paz concretas en tres oportunidades (2000, 2001 y 2008) y que fueron todas rechazadas por los Palestinos. Estas concesiones incluían la retirada del 95 por ciento de Cisjordania, el desmantelamiento de las colonias, la división de Jerusalén y la creación de un estado Palestino. Israel también ofreció concesiones, sin pedir nada a cambio, como sucedió cuando se retiró en forma unilateral de Gaza en 2005 y desmanteló todos los asentamientos en la Franja.
Hamas se opuso desde el vamos al proceso de Oslo e hizo todo lo posible por torpedear el proceso de paz mediante actos terroristas. Su plataforma no habla de 1967, sino de 1948. Su objetivo es establecer hegemonía árabe islámica sobre el territorio de Israel dentro de la línea verde y toda la palestina histórica e incluso ligarse a un movimiento pan Islámico que abarque más elementos dentro del mundo árabe.
El terrorismo de Hamas no tiene nada que ver con la resistencia. De hecho también derrocó al gobierno de la Autoridad Palestina en Gaza mediante una rebelión cruel y violenta. Estos son los parlamentarios democráticamente elegidos del cual Brieger habla y sostiene que están presos. Estos parlamentarios son miembros de una organización terrorista. Ellos también dirigieron este derrocamiento e impusieron su gobierno sobre Gaza.
Para rematar, Brieger dice que la tendencia de Israel es expansionista y predice que Israel, en represalia, tomara más ciudades y seguirá encarcelando y asesinando palestinos.
La verdad es que la mayoría de las ciudades palestinas están bajo control de la Autoridad Palestina y, en el caso de Gaza, bajo la autoridad total de Hamas. Hay autogobierno y las autoridades Palestinas son responsables por lo que ocurre dentro de ellas incluyendo los innumerables casos de violación de derechos humanos. Israel tiene control militar de la zona por razones de seguridad (área C). Esta situación estaba supuesta a ser temporaria hasta la conclusión de un acuerdo final que todavía no se dio, pero no ejerce gobierno directo sobre la población Palestina.
Según los testimonios de personalidades y diplomáticos involucrados en el proceso de paz, incluyendo el ex presidente norteamericano Bill Clinton, los negociadores Dennis Ross y Martin Indyk y el exfuncionario del gobierno de Bush, los asentamientos israelíes nunca fueron la razón por las cuales las negociaciones fracasaron. Las negociaciones fracasan porque la dirigencia Palestina exigía el control de los lugares sagrados en Jerusalén y además exigía el retorno de tres millones de palestinos a Israel lo que supone la pura y simple disolución del estado hebreo. Nadie dice nada del cierre de la frontera por los militares egipcios que revientan a patadas a los palestinos que tratan de cruzarla antes de averiguar sus intenciones como hace Israel "sin violar derechos humanos".