La pseudo lucha contra el antisemitismo. Por Luis Thonis.

.

En Sarcelles, Francia, llamada “la petite Jérusalem”, donde vive una importante comunidad judía sefaradí se quemó una sinagoga, algo que no sucedía desde la Edad Media con graves incidentes. Roger Cukierman, el Presidente delas instituciones judías en Francia declaró: “Se está importando la jihad contra los judíos en Francia. Se apunta a la República”.

Pero sus autores no se consideran antisemitas.

Ya no existe en el mundo nadie que se diga antisemita.

Ni la izquierda ni Le Pen que están el mismo combate y sostienen a Hámas y suspiran por Putin, exterminador de los chechenos que no cotizan en el mercado bienpensante..

Ahora la posta para "sentirse bien" es decir: “no soy antisemita, soy antisionista"

El progre antisionisa ama a los judíos pero si están muertos. Y mucho más a los palestinos muertos, especialmente si son niños que Hámas les sirve al por mayor utilizándolos como escudos humanos y luego exhibiéndolos. 
El niño palestino muerto en la Argentina tiene alta cotización en relación a un niño quom asesinado por Insfrán que no vale un céntimo para madres, abuelas y todo el consorcio mafioso que gobierna. 
Es un mercado pornográfico que hay que desactivar..

Es el logro de la pseudo lucha del progresismo contra el antisemitismo. El discurso es el mismo de la Edad Media donde se acusaba a los judíos de cometer crímenes rituales con niños. O el de los años treinta del siglo XX donde dominaban la banca y manejaban todos los resortes del mundo.

Vigencia de los Protocolos de los Sabios de Sion que Hámas ha convertido en programa de acción.

La referencia de la izquierda bazofia argentina sigue siendo Hugo Wast a los que los Badiou o Deleuze- en su trabajo Grandeza de Arafat- y feminazis asociadas como Judit Bulter superan largamente.

Se quiere barrer el orden simbólico como paso previo para demostrar que los judíos de ayer se volvieron los nazis de hoy. Todos los caminos de la "lucha contra el antisemitismo" posmo y progre van a parar a ese asador.

Para que cualquier cosa pueda signficar una cosa cualquiera y el qualumquismo generalizado propicie el retorno de los nuevos faraones que entre sí se disputan la presa

La Argentina debe dejar de hablar el dialecto dhimmi y servil y romper el pacto abyecto con Irán y colocarse del lado de Israel, es decir, de la libertad.

Como dijo con elocuencia mi amigo Cristian Godoy: Nos masacraron dos veces y les chupamos la pija a los ayatolas de la muerte.

La verdad de las verdades la enunció el Rey Nasrallah de Marruecos: "Los judíos son el afrodisíaco del mundo árabe".

El nazislamismo es la estación terminal del zombi vanguardismo en occidente. El último madero a que aferrarse para completar con una solución final integrista su destrucción igualitaria- nihilista de todos los valores en función de un nuevo supermono bienpensante que supone el blanqueo de la historia real.

La segunda Shoá se prepara no sólo en las madrazas sino en las universidades de un occidente idiotizado por los ideólogos y el Espectáculo que articula medios- universidad y Moral.

La historia es un cambio de vestimentas, decía Carlyle en Sartor Resartus: la pseudo "lucha contra el antisemitismo" ha pasado de llorar judíos en piyama muertos en Auschwitz a odiar a los judíos que llevan el uniforme de Tzahal para defender a los que están vivos y se niegan a ser las presas del banquete. 
Eso es lo que hace patalear de furia a los indignados pro Hámas y a los jihadistas de domingo. A los que alzan la voz por Gaza y son indiferentes a las masacres masivas del mundo árabe musulman por parte de compañeros del Hámas. Ni una palabra sobre las masacres de Boko Haram, las de Assad en Siria- 200000 víctimas- sumadas a las de sus enemigos del Estado Islámico de Irak que masacran todo cristiano que encuentran a su paso. Menos las de Putin, exterminador impune de aldeas chechenas. 
Cuando haya distancia para leer este conflicto se verá que fue Israel quien fue el que más hizo por los palestinos a quien Hamas condena hoy al suicidio y el martirio y que fue el ejército que con víctimas propias trató como ninguno en la historia de evitar víctimas civiles que sus enemigos tratan de multiplicar adrede lo más posible.
Los asesinos en de masa de civiles indefensos no existen, sólo Israel que se defiende de las bombas evitando las víctimas civiles que Hamas coloca en hospitales y escuela donde tiene sus arsenales.

Y éste es un fenómeno global que excede a los mismos judíos porque es la libertad la que está en juego como lo demuestra la pequeña Jerusalén atacada.

Jerusalén, la situada en los montes de la milenaria Judea, "eterna e indivisible" es la madre de todas las batallas y un punto de inflexión en la guerra de los mundos para saber de qué cosa se trata y quién es quién.